Roblan presenta su nueva imagen corporativa

Han pasado 50 años desde que Roblan se fundó. 50 años es mucho tiempo… En medio siglo han sucedido demasiados cambios, tanto internacionalmente como dentro del propio sector de la iluminación, que ha evolucionado exponencialmente hasta convertirse en lo que ahora es. Es muy complicado que algo logre sobrevivir tantos años. Aquello que lo consigue es porque tiene unas firmes raíces, una esencia, un ADN que se mantiene vivo a lo largo de los años y que permiten que una empresa como Roblan siga siendo quien es.

Creemos que nuestro 50º aniversario es un buen momento para recordar nuestra historia y esos elementos que nos son innatos, ya que estuvieron presente años atrás, cuando esta empresa vio la luz.

Por todo ello, renovamos nuestra imagen para mantener intacta nuestra esencia: los cinco pilares que un día nos vieron nacer y que hoy mantenemos más vivos que nunca. Porque todo lo importante tiene un primer momento, y hoy es el momento de desvelar cómo los hemos querido mantener e incluir en nuestro logo:

1.- Las personas: Todo, a la hora de crearse, se crea por algo. Ese algo suele convertirse en el eje central que da forma y luz a nuestras ideas. Para Roblan, ese eje eres tú. Es por ti, instalador, distribuidor, arquitecto, empresario, estudiante, compañero, amigo… tú nos inspiraste en un primer momento y lo haces ahora para que sigamos creciendo.

2.- La luz: Porque Roblan siempre ha estado muy próxima a esa luz que da forma a nuestras ideas. Por eso la iluminación es el ADN de la marca que ahora ayuda a otros a alumbrar su vida: tanto los buenos momentos que queremos recordar como los más difíciles que nos han hecho crecer.

3.- La letra P: La P que recuerda al nombre del fundador, Pereira. Esa P que sigue simbolizando a la familia fundadora, que ha ido evolucionando para ahora representar a toda la “familia ROBLAN”. Clientes, colaboradores, compañeros y amigos que se unen por tener una cosa en común: una luz perenne de complicidad y positividad.

4.- El mundo: El mundo representa el futuro de la compañía y su pasión por crecer. Sabemos que la actitud que transmite esta gran familia es de positividad, complicidad y cercanía. Esto es lo que ha permitido que la ROBLAN crezca, y es un sentimiento que busca cruzar fronteras.

5.- El faro: El faro es el elemento que hace recordar esa luz del primer momento que dio forma al proyecto. El faro es la sencillez, la raíz, la idea que vio nacer a esta empresa; representa la tierra donde se crean nuestras ideas, la motivación, la inspiración y la iluminación que un día, hace 50 años, hizo nacer esta familia.

Porque hace 50 años estos cinco elementos compusieron la esencia de lo que se decidió llamar Roblan. Ha pasado medio siglo y ha llegado el momento de recordarlo, de dedicarle su lugar y espacio, siempre recordando ese primer momento que hizo de Roblan algo grande y distinto a todo lo que ya existía.