Human Centric Lighting: la persona como centro en proyectos de iluminación

Hablar de proyectos de iluminación abarca una infinidad de subsectores con características y requerimientos lumínicos heterogéneos, ya que el objetivo de la obra decidirá el producto utilizado y las características del sistema lumínico que se proyecta instalar.

Por poner algunos ejemplos, si estamos hablando de iluminar un hospital, siempre se deberá tener en cuenta que las necesidades son completamente diferentes a las que puede tener un centro educativo o un espacio comercial. Por ejemplo, en un comercio el sistema deberá proyectar la luz sobre el producto en venta, mientras que en una escuela se requerirá de una iluminación general potente y uniforme para que el ojo no necesite sobre esforzarse al realizar sus tareas.

Todo esto deriva de la necesidad de tener en mente el Human Centric Lighting. Es decir, provocar una buena experiencia al ser humano –el cliente, el usuario- a través de la iluminación instalada. Como ya muchas veces hemos dicho, una luz LED puede modificar nuestro estado de ánimo, generar confort o disconfort, e incluso modificar el comportamiento de la persona que la percibe.

Es ahora cuando la industria le da más importancia que nunca, como ocurre en otros sectores, al ser humano, a la persona que será la receptora del producto cuando proyecta su obra. Como fabricantes, en ROBLAN creemos que esta nueva manera de trabajar poniendo el foco siempre sobre las personas debe ser promovido por nosotros, por el propio fabricante, ya que es nuestra responsabilidad crear productos que beneficien a la salud y bienestar de las personas que lo usarán. Por ello, el Human Center Lighting es algo que siempre tenemos en cuenta en el departamento de proyectos para que el sistema lumínico no sea solo eficiente, sino que siempre sea positivo para el usuario, sobre todo en ciertos ambientes como las escuelas o las oficinas, donde la persona está muchas horas y su salud puede verse afectada por un sistema de iluminación mal planteado.

Este concepto se une ya a otras prácticas de iluminación más conocidas; la conectividad o la regulación de la intensidad lumínica. Estas técnicas de control son partes indisociables de un buen proyecto lumínico, ya que generan eficiencia en consumo -y ahorro energético, obviamente- y provocan bienestar en el usuario asegurando que sus necesidades sean cubiertas correctamente. Es más, podríamos decir que no se concibe actualmente un proyecto de iluminación sin contemplar estos criterios, por lo que todo instalador, fabricante, diseñador, constructor o arquitecto intenta implementarlos en sus proyectos.

Para lograr que un proyecto sea eficiente, en ROBLAN no solo proyectamos una inversión en el periodo más cortoplacista, sino que realizamos, siempre con cada pedido, un cálculo de amortización del proyecto que permite conocer tanto al cliente final como al instalador cuál será el ahorro en el medio y largo plazo. De ese modo, aunque inicialmente pueda suponer una inversión mayor, el cliente final podrá tener una visión global del coste que quedará amortizado tras su uso. Este cálculo se complementa con la oferta de un amplio abanico –y tres gamas- de productos ROBLAN que se adaptan perfectamente a las exigencias del cliente, ya que un proyecto puede incorporar desde aquellos equipos con rendimiento más básico a otros más técnicos que exijan un rendimiento mayor.

Es por todo ello que ROBLAN considera que el Human Center Lighting es una obligación que poco a poco todo fabricante impondrá en sus proyectos. Así, empresas como la nuestra desarrollamos año tras año nuevos productos, como puede ser la gama LCR de ROBLAN, que ofrece suficiente flexibilidad para adaptarse a cualquier necesidad lumínica. Por ejemplo, es ideal para espacios comerciales, proyectos que siempre conllevan una dificultad añadida: lograr un buen nivel de iluminación sin generar calor a los trabajadores y visitantes del recinto y además ser suficientemente flexible para adaptarse a un rediseño de la tienda, supermercado, oficina o colegio.

Ahora, con el nuevo Linear Comercial Rail (LED LCR) de ROBLAN se pueden poner en marcha proyectos lumínicos eficientes con un sistema de iluminación continuo y sin sombras manteniendo la alta potencia lumínica de 160Lm/W y con cero mantenimiento. Además, este producto facilita inmensamente la labor de los instaladores, ya que no requiere mantenimiento y cuenta con una flexibilidad de montaje con su instalación rápida y cómoda, lo que permite cambiar la óptica o recambios en solo 45 segundos.

Y tú, ¿tienes en el centro a la persona, al usuario, cuando proyectas, diseñas o instalas luminarias LED en tus proyectos? Recuerda que, si necesitas asesoría para tu obra, nuestro departamento de proyectos está a tu entera disposición. ¡Te esperamos!